El Observatorio ‘Stop Machitroles’ de la Cátedra de Feminismos 4.0 aporta una primera radiografía de la violencia machista digital en el sur de Galicia
La Cátedra de Feminismos 4.0, una iniciativa impulsada por la Universidad de Vigo y la Diputación de Pontevedra, presentó el primer informe del Observatorio Stop Machitroles, que aporta una primera radiografía de la violencia machista digital en el campo territorial del sur de Galicia.
En concreto, permitió identificar tres tipos de violencias online a través de los datos recogidos de víctimas anónimas. Esta tipología se elaboró a partir de los datos recogidos por el Observatorio desde su creación en junio de 2021. A través de la web de la Cátedra recopila datos de forma anónima de mujeres que experimentaron violencia machista digital. Estos datos se pueden aportar a través del siguiente formulario.
Un contexto preocupante
La presidenta de la Diputación de Pontevedra, Carmela Silva, fue la encargada de inaugurar el acto, y quiso comenzar agradeciendo la colaboración de la Universidad para hacer realidad la Cátedra de Feminismos 4.0 y, en especial, el apoyo del rector de la Universidad, “porque es importante poner en valor los hombres feministas”. Manuel Reigosa respondió a estas palabras de la presidenta provincial reconociendo que este acto le suponía “un cierto carrusel de emociones, porque ser considerado feminista es para mí un honor y un orgullo”. Pero, al mismo tiempo, el contexto que se refleja en el informe es, reconocía, “preocupante”, con situaciones que “atentan de manera absolutamente descarnada contra la igualdad”. En su opinión, son ataques que hacen que muchas mujeres “acaben aburridas y escondan su mensaje”. El rector de la UVigo también se mostró “muy orgulloso del trabajo de la Unidad Igualdad y de que nuestra institución haya elegido como uno de los tres ejes de desarrollo futuro dentro de su Plan Estratégico por unanimidad el tema de igualdad”.
Sobre el contexto en el que nace este primer informe sobre violencia machista digital en Galicia, Carmela Silva recordó que “intuitivamente no tenemos ninguna duda de que los espacios tecnológicos y las redes sociales son lugares no seguros para las mujeres, lo sufrimos todas, particularmente las que tenemos presencia pública”. No obstante, recalcó, “el mundo no avanza si a lo que intuimos no se le aporta el análisis, el conocimiento, estudios que permitan situar con claridad cuál es esta realidad”, y esa es la finalidad del Observatorio Stop Machitroles.
En este sentido, la directora de la Unidad de Igualdad, Águeda Gómez, recalcó que tras más de una década uso masivo de redes sociales son escasos los datos sobre la prevalencia y las formas de estas violencias en línea. Este estudio trata de “aportar algo de luz sobre el comportamiento de este tipo de violencias”.
Tipos de violencia identificados
El contenido del informe aportación, por tanto, datos que permiten evaluar la forma de operar de las violencias machistas digitales en el ámbito territorial del sur de Galicia. En este sentido, y siempre a partir de la información obtenida, se identifican tres violencias diferentes.
Una de ellas son los ataques machistas individualizados. Están dirigidos a mujeres solo por el hecho de ser mujeres. Buscan desvalorizar, difamar y minar la reputación y los logros femeninos y suelen actuar contra periodistas, políticas, artistas, deportistas, o académicas.
Utilizan fórmulas muy diversas como el ciberacoso o cyberbullying, mansplaining, hatespeech, flaming, y- bile, doxxing, crackeo de cuentas, acusaciones falsas, suplantación de identidades o utilización de programas espía para controlar los movimientos en línea de las mujeres.
El segundo tipo se corresponde con las violencias sexuales digitales. Están destinadas a controlar los cuerpos, disfrute y sexualidad de las mujeres, mediante distintas acciones. Entre ellas, comentarios, acoso e insultos de carácter sexual y las amenazas de violación; pornovenganza (1) y pornografía no consentida o distribución de imágenes íntimas sin consentimiento, captación online, registro y difusión de agresiones sexuales a mujeres con fines de trata para la prostitución, sextorsión, grooming con menores y pornografía.
En muchos casos, las personas que perpetran esas acciones proceden del ámbito próximo de la mujer agredida: ex parejas, familiares, compañeros de estudios o de trabajo, vecinos o clientes.
Por último, hay un tercer tipo, denominado misoginia virtual organizada, también conocida por el término machoesfera o los anglosajones manhood y manosfera. Se trata de una estrategia destinada a hacer hegemónico el discurso de odio misóxino y la violencia simbólica en el espacio virtual y silenciar, invisibilizar y disciplinar las retóricas de las mujeres feministas en el paisaje digital, con la connivencia de las grandes empresas tecnológicas (Twitter, Youtube, Facebook, TikTok, Telegram, Twich, Google, etc.) y de las instituciones públicas.
A través de un patrón estructural organizado y altamente sofisticado a nivel tecnológico, atacan sistemáticamente servidores, sitios web y contenidos, consiguen cierre de cuentas y ejecutan acciones masivas contra discursos y perfiles feministas.
Ataque experimentado por el Observatorio
Precisamente este último tipo de violencia fue la que sufrió el propio Observatorio entre los días 24 y 25 de junio de 2021, justo el día posterior al lanzamiento de esta iniciativa. Se experimentó un ataque masivo procedente del ecosistema de la manoesfera nacional con el fin de boicotear esta iniciativa de la Cátedra, concretamente desde el portal Forocoches.
Este portal cuenta con casi 900.000 cuentas o perfis inscritos, segundo la propia compañía y con más de seis millones de personas usuarias únicas por mes. En algunas discusiones predominan ideas propias de la extrema derecha, el fascismo y de desprecio palpable respeto a las mujeres y al feminismo.
En este ataque se observó el mismo modus operandi en distintos hechos acontecidos en las redes sociales. La falta de datos públicos, oficiales y disponibles de este tipo de ataques, no debe considerarse un hecho accidental y aislado, sino producto de una violencia sistémica con la connivencia, permiso y mismo auspiciada por los propios gigantes tecnológicos.
Debate con Elisa García- Mingo
Tras la presentación del informe se celebró un debate con Elisa García-Mingo, profesora del Departamento de Sociología de la Universidad Complutense de Madrid, especializada en la sociología del género, la sociología de la violencia, los estudios culturales y la metodología de la investigación social. La experta destacó la necesidad de ahondar en el conocimiento científico de esta realidad con investigaciones y estudios como los que realiza esta cátedra.
Segundo manifestó, “en Internet no solo surgen nuevos espacios de banalización y en el que se ataca a las mujeres, como Forocoches, sino que también están apareciendo nuevas violencias sexuales, que son tan graves como las físicas”.
La jornada se completa con un taller de autodefensa digital feminista que se celebra en la tarde del mismo jueves 27 de enero y, una segunda sesión, el jueves 3 de febrero.
Otras acciones complementarias
Ante este panorama, la Cátedra de Estudios Feministas 4.0 pretende ser un laboratorio de ideas (think tank) y una herramienta feminista para afrontar estos desafíos. Por una banda, creando helplines (líneas de ayuda) como el Observatorio Stop Machitroles para reportar, visibilizar y denunciar ante las plataformas comerciales virtuales, ante las instituciones públicas y ante la sociedad este tipo de violencias machistas en línea. También, ahondando en el conocimiento científico de esta realidad con investigaciones realizadas en la Cátedra.
Por otra parte, la Cátedra continuará acompañando y siguiendo la senda de las mujeres líderes y expertas, como las que participaron en los workshops de la Cátedra, entre las eres Karina Gibert, Lorena Fernández, Nerea Luis, Amparo Alonso, Soledad Torres, Rebeca Díaz y un largo etcétera. Ellas son representantes de las mejores mentes de nuestro tiempo, que están liderando la construcción de un hábitat virtual igualitario y común.
Una violencia en línea con efectos físicos
Aunque la violencia machista digital a priori parece menos peligrosa para las mujeres por no ser física, puede ser mucho más perjudicial a largo plazo, y también afecta a la salud física y psicológica.
Por esto, el Observatorio no solo quiere denunciar la incidencia de las violencias machistas en la Red, sino también ser proactivo e impulsar estrategias colectivas y contracampañas feministas (como el #MeToo, #Cuéntalo, #YoSiTeCreo, #NiUnaMenos) y crear productos culturales feministas ( memes, vídeos, etc., fruto de la creatividad, humor e ironía gallega feminista) que ayuden a construir el contradiscurso de las mujeres en el espacio público digital.
CONSULTA EL INFORME COMPLETO AQUÍ.
(1) Ese término es cuestionado por algunas activistas feministas (Ley Olimpia en México) pues consideran que el concepto de “venganza” da por supuesto que ellas hicieron algo malo y ellos se “vengan” y eso no es así. Quizás el más correcto es llamarlo “violencia sexual digital no consentida”.